martes, 6 de marzo de 2012
PRESENTACIÓN
Todo cuanto hay en la creación está hecho de vibraciones y de luz.
Somos un microcosmos dentro de un macrocosmos. Ambos funcionamos de igual modo: nuestro cuerpo y el Universo “como es arriba, es abajo” (2º ley Hermética). Estamos en constante expansión y regeneración. Nuestras células nacen y mueren constantemente igual que las estrellas.
Estamos rodeados de un campo electromagnético, como nuestro planeta.
Nuestro campo energético contiene huellas y recuerdos personales y ancestrales. Todo está escrito allí. Esas huellas se manifiestan en forma de “disonancias” vibracionales que deberían ser corregidas a ese nivel para que no lleguen a manifestarse a nivel físico. Si ya lo hicieron, de todos modos habría que arreglar ese desajuste energético porque, a través del cuerpo, es del modo en que nos “habla nuestra alma” : nos muestra qué tenemos que aprender, saber soltar, poder dar, etc. Para así evolucionar.
Si no buscamos el origen de los problemas físicos, estos seguirán, de una forma o de otra, allí o en otra parte del cuerpo; como una señal de alarma de lo que hay que corregir a nivel energético, en nuestro cuerpo de luz.
Las terapias vibracionales apuntan justamente a eso: corrigen, limpian, iluminan, reorganizan, la vibración de nuestro campo electromagnético y de nuestros chakras ( vórtices de energía que circulan conectando los órganos con los cuerpos sutiles) para restablecer el equilibrio perdido.
No somos víctimas. Cada uno de nosotros tiene la responsabilidad de “trabajar” por su salud y bienestar integral.
El terapeuta energético, puede obtener fuerza vital de la Energía Universal (de la que todos provenimos) y servir como un canal para estimular el proceso natural de curación que se inicia al estar en armonía nuestro flujo energético.
Estas técnicas son respetuosas de todo credo y no reemplazan, sino que complementan, la medicina ortodoxa.
Estas son algunas de las formas en las que trabajamos:
-Terapia con sonidos
Entre las terapéuticas empleadas ya en el lejano Oriente que utilizaban el sonido para restablecer el equilibrio psicofísico, encontramos los cuencos tibetanos y los de cuarzo.
Su empleo normaliza las vibraciones alteradas de los diversos órganos o estados emocionales mediante el principio de resonancia ( que sincroniza la vibración del sonido con la del órgano), devolviéndole su frecuencia oscilatoria armónica.
Su efecto es global, ya que el sonido armoniza el campo energético corporal, atraviesa la columna vertebral e influye en órganos , tejidos y células de todo el organismo. Por eso están indicados para tratar bloqueos físicos y contracturas, cálculos, problemas óseos, articulares, circulatorios, emocionales, etc.
También se utilizan para armonizar el ambiente.
El Dr. Fabien Maman, gran experto mundial en terapia con sonido y bioenergetista, acupuntor, músico y autor; descubrió a principios de los años 80 que expuestas a ciertos sonidos, las células cancerígenas estallaban y se auto – aniquilaban mientras que las células sanas se activaban, se iluminaban y fortalecían.
Hoy en día se considera a la vibración del sonido una herramienta sanadora por excelencia.
Se potencia el sistema inmunitario y endócrino, se puede cambiar el ritmo de nuestras ondas cerebrales, estando con ello más receptivos a la autocuración, así como los latidos del corazón, el ritmo de la respiración y el flujo del líquido céfalo – raquídeo.
Se alcanzan profundos estados de relajación en sólo unos minutos.
Cuencos de Cuarzo:
La moderna Biología comienza a reconocer que muchas sustancias y tejidos del cuerpo humano, tienen las mismas propiedades que los cristales líquidos. El medico e investigador americano Ryerson asegura que, existen en el cuerpo físico y en los cuerpos sutiles varias estructuras cristalinas similares a cuarzo que amplifican el resultado positivo de las terapias vibracionales. Las sales celulares, los tejidos grasos, la linfa, los glóbulos rojos y blancos y la glándula pineal, son estructuras cristalinas que forman un sistema completo en el organismo, de manera que podriamos decir del ser humano que es un "cristal vivo". Nuestro ADN se estructura en una doble espiral similar a la del cristal de cuarzo. Hay cuatro moléculas de sílice en cada una de nuestras muelas, y también está presente en la estructura cristalocoloidal liquida del cerebro. El sílice, que es cuarzo (óxido de silicio), abunda en los huesos, la sangre, el cabello, la piel, las uñas, los dientes.
Si llenamos un cuenco de cuarzo con agua y lo hacemos sonar, comprobaremos que se forman unas estaturas geométricas en su superficie. Es tanta la resonancia del cuarzo que, al aumentar la intensidad, el agua salta como si estuviera en punto de ebullición. Esto sugiere el efecto sutil que pueden producir estos instrumentos en el cuerpo, formado en más de un 70% por agua.
La acción curativa de los cuencos se debe a la resonancia entre su estructura de cristal y la propia red cristalina del organismo humano, aunque los cuencos, generan un patrón de onda sinusoidal que resuena con las partículas con las que entra en contacto, ya sea del cuerpo humano o cualquier otra materia.
El efecto curativo del sonido generado por los cuencos de cuarzo sobre el cuerpo, se produce al entrar en resonancia ambos sistemas cristalinos. El sonido producido influye profundamente a los hemisferios cerebrales. De hecho se pueden combinar determinados sonidos, llamados bineurales, para lograr su armonización que repercute en la columna y se expande a las células, líquidos y órganos.
Cuencos Tibetanos
Los cuencos tibetanos se fabricaban con una aleación de siete metales. Su antigüedad conocida se remonta al siglo V antes de C. y su origen está centrado en los chamanes mongoles del que no existe mucha información al respecto.
El sonido es un código de orden universal, tiene un idioma que el cuerpo y la mente reconocen y entienden cuando lo escuchan. A cada área del cuerpo le corresponde sonidos y vibraciones específicas. Los cuencos emiten suaves melodías armónicas que crean profundos estados de relajación ayudando a liberar la energía acumulada (angustia, estrés, miedos y otros malestares).
Cada cuenco posee un sonido fundamental y de este sonido se desprenden otros tonos más bajos o más altos que guardan una relación o proporción armónica con el sonido fundamental. Las vibraciones armónicas alteran la materia reordenando su estructura molecular, realineando y equilibrando la energía en todos los niveles.
El alto contenido de agua de los tejidos corporales (70%) contribuye a transmitir el sonido y el efecto general se puede comparar con el de un masaje profundo a nivel de células y átomos.
El sonido de los cuencos ayuda a:
• Liberar bloqueos y tensiones aliviando el stress y la ansiedad
• Equilibrar los hemisferios cerebrales
• Armonizar los chacras
• Estimular la actividad de las ondas alfa ayudando a una relajación profunda
• Limpieza del entorno
-Esencias Florales
Esencias del Dr. Bach:
El Dr. Edward Bach (1886-1936), médico galés, descubridor del sistema de remedios florales que lleva su nombre, afirma que hay dos elementos en cada uno de nosotros. El Alma que es nuestra esencia, inmortal, y la Personalidad que es temporal y material. Ambas tienen que estar en armonía.
Cuando el Alma y la Personalidad se alejan, se crean las condiciones que propician desórdenes emocionales o nerviosos que en caso de agudizarse se convertirán en desórdenes funcionales, endócrinos, y luego, en patologías.
Las esencias florales escanean y restauran las pérdidas de frecuencia correcta en los diferentes sectores del campo electromagnético, lo cual implica el alivio o cese de la alteración.
Tratan diversas situaciones emocionales como: miedos, soledad, desesperación, estrés, depresión y obsesiones.
Además abren la posibilidad de salir de la inercia al permitir mayor capacidad de reflexión y de silencio interno.
La verdadera cura viene de nosotros mismos, al poder reconocer y corregir lo que no está en armonía en nosotros, cambiando nuestra perspectiva del mundo.
Hoy son mundialmente aceptadas por ser un sistema inocuo y altamente efectivo para tratar problemas físicos, mentales y emocionales.
Esencias del Dr. Linneo:
La ciencia ha descubierto la existencia de genes reloj tanto en las plantas como en el ser humano.
La incorporación del Gen reloj vegetal en una persona modifica los patrones rítmicos de ella para restablecer su equilibrio.
Según la Cronobiología: la Salud depende de la sincronización de los ritmos biológicos entre sí de los genes reloj ubicados en los órganos y éstos con los ciclos cósmicos.
Por medio de estas Esencias florales se puede introducir el Gen reloj vegetal de diferentes especies para corregir alteraciones pasajeras o crónicas de nuestros relojes internos.
-Armonización energética y de chakras.
El terapeuta chequea el estado de los chakras y del Campo energético o aura mediante diferentes técnicas.
Se reactivan, redireccionan , limpian los chakras afectados, armonizando así a la persona en su totalidad.
Se puede complementar la armonización con el uso de sonidos, aromaterápia y/o gemoterápia.
-Gemoterapia
Los cristales se crearon cuando la Tierra se formó, y han seguido metamorfoseándose a medida que el planeta ha ido cambiando. Los cristales son el ADN de la Tierra, una impronta química dejada por la evolución. Son almacenes en miniatura que contienen los registros del desarrollo de la Tierra a lo largo de millones de años, y son portadores de un recuerdo indeleble de las poderosas fuerzas que la han conformado.
Debido a las impurezas, a la radiación, a las emisiones terrenales y solares, y al medio exacto donde se ha formado, cada cristal emite su “nota” específica.
Todo esto afecta sus propiedades y su manera de funcionar. Tomen la forma que tomen, su estructura cristalina puede absorber, conservar, enfocar y emitir energía, especialmente en la banda de las ondas electromagnéticas.
-Radiestesia y Radiónica
El diagnóstico de cualquier desajuste o patología se basa en el descubrimiento de las distorsiones del campo electromagnético del paciente.
El tratamiento consiste en aplicar la frecuencia o vibración apropiada para corregir esa distorsión energética y así devolver la salud.
Estas técnicas actúan aún a distancia.
-Energía Tachyón
La energía tachyón es una energía ordenadora y armonizadora de todos los campos electromagnéticos que rodean el cuerpo, así como el nivel físico, emocional, mental y espiritual. Al ordenar todos los niveles, se experimenta un aumento de la energía y resistencia física, claridad mental, tranquilidad, mayor intuición y armonía en todos los niveles, produciendo una sensación de bienestar y fuerza.
Es Gerald Feinberg, un físico en los años 60, a quien debemos el término de taquiones ( del griego takhus , rápido). Utilizó la teoría de la relatividad para demostrar la existencia de partículas que se mueven más rápido que la velocidad de la luz lateral y existiendo del "otro lado del velo ".
Los tachyones son antenas de transmisión de la energía Tachyon y permiten la interactividad consciente entre "ambos lados del velo".
Ayudan a la activación de las fuerzas de autosanación.
Pueden actuar a distancia.
Sobre los conceptos aquí expresados:
Ya entre las culturas de hace más de 7.000 años de todo el mundo: India, Egipto, Africa, etc; podemos observar en su iconografía, (y el ejemplo más reciente y todavía utilizado es en las imágenes del culto Cristiano), cómo se representan a los seres que tienen un equilibrio, armonía y/o evolución espiritual, con su chakras 7º (corona), cardíaco (coronario) y de las manos ( canales para la sanación) abiertos, irradiando luz.
Podemos ver a todas las imágenes de los Santos Cristianos en general, La Diosa Hathor en Egipto, Budha, etc. Con su chakra corona (halo) encendido, que los conecta con la energía Creadora, El Ser, Lo que Es o Dios.
En otras, como en el Sagrado Corazón de Jesús, vemos como quien está en condiciones de entregar el Amor en todo su totalidad y magnitud , tiene abierto su chakra cardíaco e irradiando luz. Hoy la mayoría de la gente tiene su 4º chakra cerrado, bloqueado o sucio energéticamente, por eso las enfermedades cardíacas son uno de los flagelos de nuestra época.
Los chakras de las manos se activan cuando despertamos nuestra capacidad de dar y de sanar. (Vírgen de la Medalla Milagrosa).Aún conservamos el instinto de llevar nuestras manos a donde nos duele o les duele a otros con la intención de sanar.
Estos conceptos fueron olvidados cuando las religiones y la ciencia disociaron a la espiritualidad del cuerpo físico. El chamán era a la vez sacerdote y médico y el ser humano se entendía como un todo.
Un desajuste en nuestro campo energético / emocional, produce luego un desequilibrio fisiológico y/o endocrinológico y más tarde se manifiesta en alguna parte del cuerpo.
Pero, como dicen las profesías de casi todas las prácticas espirituales y los cultos religiosos: Llegará el tiempo en que todo se vuelva a poner en su lugar y el Hombre comience a recordar y a reencontrarse con SU VERDAD
Breve reseña sobre los chakras:
El 1º Chakra: es el Raíz: se halla en el perineo y nos conecta con la tierra, con lo más básico de nosotros, el instinto de supervivencia, nuestra energía vital; es nuestro “cable a tierra”. Emite vibración color roja.
2º Chakra: Sexual, Creativo: Sus órganos regentes son los reproductivos y los riñones. Sexualidad, filtro, creación; son sus acciones. En armonía irradia color naranja.
A partir del 3º chakra es donde el hombre moderno comienza a estar bloqueado y desconectado. Los chakras más afectados en nuestros días son el 3º y 4º.
3º Chakra: Es el plexo Solar: regido por el Páncreas y generalmente es el más “sucio” porque es el asiento de las iras (cálculos en la vesícula) y los miedos no expresados (estómago). Exceso o falta de dulzura (páncreas). Abierto emite color amarillo – dorado.
El 4º Chakra es el Cardíaco – Coronario: regido por el corazón. Tiene que ver con la capacidad de manifestar y dar amor en todas sus formas ( de pareja, fraternal y hacia uno mismo; también el amor universal). Abierto emite vibraciones color verde y rosado.
5º Chakra: Laríngeo: Regido por la glándula tiróides.Tiene que ver con la comunicación: hacia los demás y con uno mismo y con nuestras oscuridades. En armonía emite un espectro de vibración azul – celeste.
El 6º Chakra es el del 3º Ojo: relacionado con la visión y la intuición. Emite una vibración en el espectro índigo. Los seres índigo tienen preponderancia de ese color en su campo energético porque tienen muy desarrollado este chakra y sus cualidades.
El 7º Chakra es el Corona: Nos conecta con nuestro Ser superior, que no tiene tiempo ni espacio, nuestra divinidad, nuestra Alma. Abierto emite color blanco puro.
Cada parte del cuerpo físico está relacionado con un Chakra principal o secundario y a su vez , con una serie de emociones. Cada desajuste emocional corresponde a un desequilibrio de salud en algún órgano, sistema o glándula. Por ejemplo: los problemas articulares y las contracturas tienen que ver con una falta de apertura y flexibilidad mental y la dificultad para aceptar los cambios.
Nuestro cuerpo nos habla de la Salud de nuestra Alma.